A medida que pasan las horas, se revelan escabrosos detalles sobre el perfil del enfermero que habría intentado abusar de una niña en la capital del Chaco. Una joven de 26 años ha descubierto que, cuando era niña, el mismo hombre la sometió. Además, este individuo ya había recibido una condena por violencia de género.
El caso del depravado haciendo exhibicionismo en la calle, tras un intento de abuso a una niña de 11 años que se trasladó desde el barrio España hasta un kiosco en Provincias Unidas, sigue generando consecuencias. Una víctima de Abuso Sexual en la Infancia (ASI) vio el video en las redes y quedó paralizada al reconocer a Darío Aníbal Montiel. Cuando ella tenía seis años, habría sido sometida por el amigo de su hermano. Montiel, que ahora tiene 34 años, tenía solo 9 en ese momento.
El domingo 19, el licenciado en enfermería Montiel fue captado por la cámara de seguridad de un domicilio en una situación de exhibicionismo tras intentar abusar de la menor. El hecho no se consumó gracias a que una vecina socorrió a la niña y la llevó a su casa. Montiel, quien trabajaba hasta el día de su aprehensión, para una empresa de servicios médicos a domicilio, fue grabado en una situación indecorosa.
La denuncia del supuesto intento de abuso fue realizada por el padre de la menor y, finalmente, el lunes, el acusado fue detenido por agentes de Investigaciones Complejas en calle Vedia al 1.807. Montiel designó un abogado y se espera que comparezca a declarar como imputado ante la fiscal Ana González de Pacce.
El caso se agrava aún más porque el mismo día que se conoció lo sucedido en Provincias Unidas, otra mujer de 26 años tuvo que revivir un momento traumático que la marcó para toda la vida. Según denunció en la División de Violencia Familiar y Género —de la cual se preserva su identidad—, cuando era menor, Montiel, amigo de su hermano, con un engaño la llevó a su casa y abusó de ella. Sin embargo, cuando él se bajó los pantalones, ella logró escapar. Los padres radicaron la denuncia en aquel entonces, pero al ser ambos menores de edad, la causa no se judicializó.
Un dato inquietante es que una cuñada de Montiel le confesó a la denunciante que sus hijos le manifestaron que su cuñado los besaba en la boca.
Por otro lado, Montiel cuenta con una condena por lesiones agravadas por el vínculo y violencia de género, donde fue sentenciado a seis meses de prisión en suspenso por el Juzgado Correccional N°1 de Resistencia.
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