El lunes por la mañana un equipo de Gendarmería Nacional allanó las oficinas de la municipalidad de Enrique Urien, liderada por la intendente Liliana Pascual, y quien se encuentra acusada de supuesta malversación de fondos públicos, enriquecimiento ilícito y lavado de activos, entre otros delitos. Sin embargo, en el operativo encontraron tan solo ocho facturas y fotocopias.
Así se desprende de los resultados confirmados por el fiscal que lleva adelante la causa, Carlos Amad.
También se encuentra imputada en una causa que la acusa por falsedad ideológica, y que tiene que ver con su función pública.
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